Hace ya varios meses que he querido escribir acerca de las maravillosas palabras en nuestro lenguaje.
Antes de empezar debo aclarar que no me tomé la molestia de indagar acerca de las palabras y su semántica, ofrezco una sentida disculpa; la verdad me dió flojera... asi que, éste es un buen momento para que los puristas detengan la lectura.
Bien, un adjetivo o un sustantivo estratégicamente usados logran un buen impacto. Tengo la impresión de que la elasticidad del español nos permite adjetivizar sustantivos... o verbalizar adjetivos, ¿me explico? Por ejemplo una palabra que me encanta:
Sospechosismo: Es difícil definir su significado pero se podría decir que se compone por dos palabras: sospechar, "creer o imaginar que ha ocurrido cierta cosa por un indicio"; y la segunda, el sufijo "ismo", que se emplea para nombrar "doctrinas o tendencias sociales". Quizás, sólo quizás deba agradecer a nuestro ex secretario de gobernación haberlo escuchado por primera vez:
Santiago Creel exigió que se termine con la cultura del sospechosismo en nuestro país...
La verdad, a mi si me impactó la primera vez que lo escuché y tarde un poco para entender el mensaje: "¡basta de ver moros con tranchetes en todas partes!"
Otras frasecitas apantalladoras:
Cuando se habla del valor cognoscitivo de la ficcionalidad, blah, blah, blah...
Tiene bastante caché ¿no? Decirlo de otra forma es demasiado simplón: Hablemos del conocimiento de la ciencia ficción.
"¡Que mala actitud tienes!" - no tiene la misma fuerza que decir: "¡Siempre predomina tu postura negativista!"
Por otra parte, es fascinante la manera en que podemos hermosear una frase:
"Le sonrió y ella correspondió cerrándole un ojo... ¡naaa! muy burdo, pero que tal si decimos:
Él la miró y esbozó una sonrisa, en reciprocidad, ella le hizo un guiño.
Bonito ¿no?
No es igual decir: "¡siempre me llevas la contraria!"- que: "Siempre antagonizas mis decisiones"
Por cierto los barbarismos, ¡wow! algunos son realmente ¡geniales!, lo bonito de ellos es inventarlos uno mismo:
"Comunicación satelital"
"Agendemos una cita"
"Posicionate sobre el icono"
"El agudizamiento de la tensión política en medio oriente"
"El periódico recibió varios comentarios alusorios al reportaje de Chiapas"
Cuando pensé en este escrito tenía muchísmos ejemplos y ahora se me escapan... ¡Diantres, es frustrante! En fin... espero que esta lectura no haya sido aburrida... al menos queda como ejemplo de lo que le sucede a mi mente cuando a principio de semana corren por mis venas 3 refrescos de cebada y algunos Marlboro contaminando el oxigeno que debería llegar a mi cerebro.
